SE ACABÓ EL TIEMPO PARA "EL DIARIO DE HONDURAS".


Sin esperanzas y con un futuro incierto, están los más de 180 empleados del Diario El Tiempo, con la incertidumbre de no saber que pasará ante esta decadente situación que generó el cierre de esta empresa de comunicación.

A pesar de esta tragedia que es un golpe al Periodismo Nacional, Roberto Corea editor de este diario, accedió a contar su historia y a compartir la pena de sus compañeros que solo esperaban su jubilación.

Con la tristeza que opacaba su rostro dijo “Ingrese al Diario exactamente el 1 de octubre del 1991, hace ya 24 años, joven lleno de energía y con la esperanza de hacer una carrera”.

Corea empezó como un reportero “así empezamos todos” dijo, y un tiempo después paso a editor del diario, “Al pasar un tiempo adopte la loca idea de apostarle a un sueño de poder jubilarme” agregó el más antiguo de los editores en esa sala, sin pensar que su sueño se acabaría la noche de ayer.

La acción de los empleados del Diario en Tegucigalpa y San Pedro Sula fue presentarse a trabajar y lo seguirán haciendo hasta que se les notifique lo contrario.

Por otra parte, Edwin Romero, presidente del Colegio de Periodistas de Honduras (CPH), dijo que como institución ellos están llamados a velar por los derechos de los periodistas que ahí laboran destacando que están pendientes de cada resolución al respecto.

Y en otro escenario las autoridades de la Secretaría del Trabajo, viajaron ayer a San Pedro Sula para analizar el proceso de liquidación de la nómina del Diario y garantizar los derechos laborales de todos los empleados.

Olman Uclés periodista redactor del diario digital afirmó que los empleados temen porque no les sea pagado su salario debido a que se les adeuda dos quincenas referentes a la última de septiembre y a la primera de octubre.

Según Uclés el diario tiene un fondo que estima a los 250 mil lempiras monto inferior al que requiere para poder liquidar a todos sus empleados es de100 millones de lempiras, y tiene una deuda de 200 millones entre proveedores y clientes de la empresa, haciendo un total de 300 millones de lempiras.

Uclés conto su primer reacción a la injusticia y dijo “a mis ojos vinieron las lagrimas y pensando que más que la situación que vive el diario, se trata de la situación que está viviendo el periodismo nacional”, por lo que Uclés califico como una tragedia lo que padece el Diario.

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